
¡Ya valió madre! No hay nada
más jodido para un publicista que sacar un buen insight, ese que conecte a las
personas con la marca; día a día, se publican miles de artículos sobre la
importancia de las emociones en la publicidad, pero depende del segmento al que
se dirija la campaña.


Vale madre lo que digan las
agencias, no existe un proceso creativo que pueda opacar las experiencias, pocos
planea lo que le va a pasar en el futuro (basándose en estadísticas), existen
probabilidades de pronosticar consecuencias, pero pocas tocan los talones del
100%; a menos de que te tomes el tiempo de ver un video de un Youtuber, esos
hijosdep*** si saben sacar buenos insights. Sin necesidad de títulos universitarios
han arrasado con la seriedad del concepto, no improvisan pero si se la cranean para
hacer de un simple videíto compartiendo su opinión frente a cosas que pasan, es
tal el sismo de sus comentarios que apoyándose en la bufonería captan a miles o
millones (en algunos caso) de personas que no se cansan de verlos en escena.
Inteligentes o no, producen mejores resultados que cualquier marca, además que
no están vendiendo algo en específico, convirtiendo su relación con los
espectadores en esas que ya no existen, basándose en confianza y lealtad, algo que han perdido
muchas marcas a causa de sus mentiras y que así saquen buenos insights nunca, jamás
igualaran el impacto sincero de estos anónimos que ya no lo son, y que siguen
haciendo historia, regando carcajadas alrededor del mundo.

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